Como la mayor parte de las noches, sone con mi papa. Su ausencia me pesa cada dia,a cada momento.
Mi viejo estaba conmigo pero se tenia que ir. No por que no tuviera ganas de quedarse, era a pesar de el que se tenia que ir. Yo lo abrazaba y lloraba y le preguntaba si iba a volver, y el me decia que si... en los suenos.
Y me levante, ademas de muy muy triste, pensando que cosa increible son los suenos. Es un modo fabuloso de "reencontrarse" con personas que no estan. Y no es como en las fotos o en los videos, porque ahi es la repeticion de lo identico, vemos siempre el mismo gesto, la misma expresion, las mismas palabras. En cambio en el mundo onirico podemos verlos en otras situaciones, escuchar su voz diciendo otras cosas, mantener dialogos nuevos, interactuar, sentir el calor de un abrazo, tener aunque sea por un ratito, aunque sea inventado, la sensacion de reencontrarnos.
Claro que despues de esa panacea viene lo terrible, el despertar, la caida abrupta. Caer en que no, que la ausencia no desaparecio, que creimos que estaba pero no esta. Pero aun asi, a pesar de que sea un ratito de ilusion contra todo el resto de realidad, asi y todo es una posibilidad maravilosa y fascinante que nos da nuestra existencia humana esto de poder sonar.
Asi es que me queda la esperanza de que pronto vuelva a verlo... en los suenos.
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