Estoy ensayando una obra de tiatro. De este hecho saqué varias conclusiones, a saber:
- que retener en la memoria un texto en otro idioma, por mas bien que lo hables, te lleva el doble de tiempo que en tu lengua materna. Y que el riesgo de encontrarte en escena con un blanco absoluto y la consecuente mirada desorbitada de la actriz con la que hacés la escena, es altamente alto.
- que tengo memoria mas visual que otra cosa. Me acuerdo cómo es la pagina, con qué color subrayé el texto, y que está ubicado arriba a la derecha pero no me acuerdo que corno dice, que de todo esto es lo único verdaderamente importante.
- que estar en el escenario es una de las experiencias mas alucinantes del planeta, un viaje absoluto, por un espacio de tiempo sos vos pero no sos mas vos, todo muta y sentís que sos creador de algo, creador de tu misma existencia.
- que está buenisimo saber captar al vuelo un imprevisto (por ejemplo que una actriz se tropiece con vos y te haga caer) para que en lugar de dejarte desorientado se transforme en un gag, y que si encima haces reir a las otras personas del elenco, sos Gardel, Lepera y Lefrutilla (!)
- que partir de una obra escrita en papel, plana, y vivir todo el proceso de transformarla en algo vivo es propiamente la esencia del teatro y es sublime.
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